miércoles, 13 de enero de 2016

Huerto Ecológico 2016



Comienza la nueva temporada en el huerto ecológico aunque ya llevamos todo el otoño preparando los bancales, los hemos limpiado, aireado y abonado con compost de caballo mezclado con nuestro propio compost; hay que darle de comer a la tierra.


Tenemos plantadas en todo el bancal 1 escarolas para probar como se dan en invierno y poder, si todo sale bien, ofrecer a algunos restaurantes amigos para que me den su opinión. Hasta ahora como la producción de las hortalizas no era muy grande no nos habíamos planteado hacerlo.


También hemos habilitado una zona en el jardín donde queremos plantar otro tipo de hortalizas que por sus características no es aconsejable plantar en los bancales. En principio queremos utilizarlo para  plantar en él frambuesas, arándanos, grosellas, patatas, maíz y grelos, y si nos queda espacio sandías, melones, calabazas, girasoles, alcachofas, bueno a ver qué conseguimos.


El día de Navidad sembramos los guisantes y tirabeques en su bancal correspondiente y ya han germinado todos. Los hemos sembrado directamente en el bancal a unos tres centímetros del suelo y cubiertos con humus de lombriz.


Desde el jueves 7 de enero tenemos sembradas en semilleros semillas de Cogollos de Tudela, Puerros y dos tipos de Lechuga, la Maravilla de Verano y la Hoja de Roble, que protegeremos en los mini invernaderos hasta su trasplante.


Todas estas tareas las hemos realizado siempre en los mejores días indicados en el calendario de agricultura biodinámica, una de las claves para tener un huerto sano.


Este año nos hemos propuesto optimizar un poco más los cultivos para sacarle más partido a los resultados, cultivando más cantidad de las hortalizas que se dan mejor, para poder tener más producción. Hay plantas que no se dan muy bien y lo único que hacen es ocupar espacio.


Ya llevamos cuatro temporadas completas desde que comenzamos a seguir el método de Gaspar Caballero y con ellas hemos completado el primer ciclo de rotaciones, la verdad es que estamos muy contentos con los resultados, cada año más, la sensación que te da sembrar una semilla y después comer sus frutos es indescriptible, tenéis que probarlo.


¡¡¡Primer Ciclo Completo, a por el segundo!!!